La semana pasada, la Corte Suprema de Justicia ratificó la condena a prisión por cohecho para Amado Boudou, ex vicepresidente de Cristina Fernández durante su segundo mandato. Inmediatamente, varias figuras del kirchnerismo realizaron declaraciones para defender al ex vicepresidente de una “persecución política” que “afecta a la democracia”.

Jonatan Viale se preguntó si esta reacción en cadena en apoyo a Boudou podría motivarse en que, el político preferido de Cristina, habría decidido “hablar”, es decir, contar lo que sabe sobre quién le ordenó apropiarse de Ciccone, la empresa que fue contratada por el Estado para imprimir los billetes y documentos oficiales.

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Las similitudes entre Amado y María Julia Alsogaray, la única funcionaria menemista que cumplió una condena por corrupción.

Comentario editorial de Jonatan Viale en “Viale 910”, por radio La Red – 08/12/20