Comentario editorial de Jonatan Viale sobre el golpe de Estado en Bolivia, y la acusación del gobierno de facto de ese país, comandado por la autoproclamada presidenta Jeanine Áñez, de sedición hacia los periodistas extranjeros, entre ellos argentinos de diversos medios televisivos. La Cancillería argentina tuvo que salir al rescate de los profesionales y repatriarlos de manera reservada para evitar que los encarcelaran. Mientras tanto, los medios bolivianos temen informar mostrando todos los aspectos de lo que está ocurriendo, y se produce un cerco informativo.
En “Viale 910”, por radio La Red – 15/11/19